CALENDARIO COFRADE

SEGUIDORES

domingo, diciembre 29, 2013

LA OPINIÓN DE MARÍA GIRALDO

La sonrisa es mi traje de los domingos

La presentación de alguien que escribe no es otra que la de sus propios escritos, así que me dejaré de formalismos. Procedo a hacer lo que más me gusta, escribir, dar que pensar, no dejar indiferente, para bien o para mal. Quien no crea opinión, no escribe, solamente se dedica a formar perfectas –y otras veces no tan perfectas- construcciones sintácticas que no suscitan nada más allá de la indiferencia.

Mi primer artículo no puede si no estar impregnado por la Navidad. Esa Navidad que nos mina a veces, la que nos hace recordar los que no están o, simplemente, los que están un poquito más lejos, esa Navidad que inunda, en muchas ocasiones, los ojos de lágrimas, como si el invierno estuviera también en nuestras pupilas. 

Sin embargo, esa misma Navidad esconde magia, una magia que solamente ella puede tener implícita. Es como el don que tiene un niño, ese don de sonreír, ya lleve las manos llenas de juguetes o vaya en brazos de su madre con las manos abiertas, vacías, esas manos que siendo unos cuantos centímetros albergan tanta dulzura… Ojalá y ese don no se fuera desgastando con el tiempo.

Traigo a colación una experiencia, que por suerte he podido disfrutar ya en dos ocasiones; salí al centro a acompañar a un grupo de amigos que pretendían animar con sus instrumentos las calles céntricas de Córdoba, ¡qué locura!, para colmo, veo que sacan su gorrillo y lo depositan en el suelo, ¡qué locura!, cuan grande fue mi sorpresa al ver que en cuestión de escasos minutos había más de medio centenar de personas que los arropaban con sus aplausos. Aprendí mucho esos días. Aprendí que hasta un desconocido puede sacarte una sonrisa, que la gratitud de las personas no se consigue ‘vendiendo penas’ –permitidme la expresión-, sino que una carcajada siempre vale más que un sollozo. Los tiempos que corren y aun así había niños que volvían avergonzados y orgullosos a esconderse detrás de sus padres al haber echado alguna que otra moneda en aquel gorrillo. Felicito a esa sociedad que sigue creyendo que los problemas son eso, problemas, y por tanto tienen solución.

Concluyo dando mi enhorabuena a todo cristiano que sienta el nacimiento de Jesús como si un nuevo miembro hubiera llegado a su seno familiar. Hago referencia al artículo del hombre de mi vida, mi padre, ¿y si alguno de los que critican la medida contra el aborto no pudieran forzar sus gargantas y gritar contra esto porque no le hubieran dado la oportunidad de vivir? Piensen, es lo único que nos mantiene vivos.


María Giraldo Cecilia

No hay comentarios:

Publicar un comentario