Escrito por Manuel Jesús Rodríguez Rechi Domingo 16 de Mayo de 2010 00:21
La Virgen del Buen Fin, ante el Convento de Santa Isabel / M. J. RODRÍGUEZ RECHI
La Hermandad de La Lanzada marcó ayer el punto álgido de los actos conmemorativos de su segundo bicentenario con la salida extraordinaria de la Virgen del Buen Fin.
A las sones de “A mi madre del Buen Fin”, estreno de Manuel Jesús Navarro, la dolorosa se echó a la calle desde la capilla de la Hermandad de los Servitas que la acogió desde la noche anterior.
A las sones de “A mi madre del Buen Fin”, estreno de Manuel Jesús Navarro, la dolorosa se echó a la calle desde la capilla de la Hermandad de los Servitas que la acogió desde la noche anterior.
La imagen visitó el Convento de Santa Isabel, la Iglesia de Santa Marina, Omnium Sanctorum y la Capilla del Rosario de Monte Sión, acompañada durante el trayecto por numerosos devotos y cofrades. Incluso, la corporación pasó por la puerta del antiguo Convento de San Basilio, donde se instaló en 1653 y ocho años después contaba con capilla propia.
Virgen del Buen Fin / MANUEL JESUS RODRIGUEZ RECHI
En el cortejo participaron numerosas hermandades e, incluso, desde Ceuta se recibió la visita de una de ellas.
A Los sones de la Banda de las Tres Caídas – abriendo el cortejo - y la Filarmónica de Pilas – tras el palio - discurrió la procesión, junto a una cuadrilla comandada por Ismael Vargas.
Los actos conmemorativos del bicentenario concluirán, definidamente, en el día de hoy con un besamanos extraordinario en la Iglesia de San Martín.
A Los sones de la Banda de las Tres Caídas – abriendo el cortejo - y la Filarmónica de Pilas – tras el palio - discurrió la procesión, junto a una cuadrilla comandada por Ismael Vargas.
Los actos conmemorativos del bicentenario concluirán, definidamente, en el día de hoy con un besamanos extraordinario en la Iglesia de San Martín.
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