CALENDARIO COFRADE

SEGUIDORES

miércoles, febrero 09, 2011

ENTREVISTA A JUAN LUIS EYRAS


Hoy la entrevista que pongo, es a un costalero, de aquellos que se parten el lomo por su gente y su cuadrilla. De los que le gusta hacer piña y decir las cosas donde se tienen que decir. Admirado o criticado por ello, es de aquellos que saben lo que es sufrir debajo de un paso. Y digo sufrir de aquellas cuadrillas que no tenían relevo en toda la salida procesional o en ensayos dónde no todos iban. Costalero añejo por la edad, que de este tipo hay pocos, pero valiente y que tiene los pies en el suelo. Os dejo con las palabras de Juan Luis Eyras.

1.- ¿Por qué comienzas en el mundo cofrade?
Cuando era pequeño como espectador, mis padres nos llevaban siempre a lo que hoy es el boulevard de Gran Capitán, que era paso obligado en aquel tiempo de todas las cofradías, y no nos perdíamos ninguna hermandad, salvo la que hacia estación de penitencia en la madrugada del viernes santo, que es la única que hoy día lo sigue haciendo. Después, cuando tuvimos edad suficiente, saliendo de nazareno con mis hermanos, en la hermandad de la que era Hermano Mayor el tío de mi madre, el Cristo de la Caridad de la iglesia de San Francisco y San Eulogio. Primero como hermano de luz, y después según las necesidades, sin solicitarlo de bocina, macero con dalmática, vara de acompañamiento…. De esta forma fui aprendiendo todo lo relacionado con la organización del cortejo procesional, y la labor que cada uno de los cargos desarrolla durante el mismo. Mas tarde, y cuando ya tenía plena conciencia de lo que entendía que debía ser una estación de penitencia, deje la túnica, a todo ello ayudaron algunos episodios vividos en mis ultimas salidas con cubre rostro.
2.-  ¿Cuáles son tus comienzos en el mundo del costalero?
                A pesar de que mi hermano pequeño, David, ya era costalero, desde hacia unos años en el palio de Maria Santísima del Mayor Dolor de la hermandad del Calvario de San Lorenzo, yo no lo hago hasta cumplidos los 21 años. En aquella cuaresma del año 93, una llamada de dos buenos amigos, que ya habían hecho su debut en el mundo del costal, invitándome a unirme a la cuadrilla de Nuestro Padre Jesús en su Prendimiento de la hermandad Salesiana del mismo nombre, me hicieron tomar la decisión que hacia tiempo latía dentro de mi, rezarle a Dios y a su Bendita Madre desde las trabajaderas que soportan el peso de sus pasos. Este primer contacto con la trabajadera lo realice con el costal y la faja de mi hermano David, que para entonces, ya hacia dos años que nos había dejado para ir a sentarse al lado de nuestro Padre en su reino eterno. Ese mismo año, y respondiendo a la necesidad comunicada de otro buen amigo, forme parte de la cuadrilla de costaleros de Maria Santísima Nazarena. Al año siguiente, y tras las dudas de si entraríamos o no, debido a nuestra altura, mi gran amigo Rafael Cuenca Acevedo y yo, conseguimos igualar en la cuadrilla de la Reina de los Mártires, de la hermandad del Cristo de la Buena Muerte adscrita a la Real Colegiata de San Hipólito. En la siguiente cuaresma entre a formar parte de la cuadrilla de costaleros de María Santísima de Gracia y Amparo de la hermandad de la Sentencia de San Nicolás de Bari.  
3.- ¿Dónde empiezas y que sacas actualmente?
                Como ya he comentado, comienzo formando parte de la cuadrilla de Nuestro Padre Jesús en su Prendimiento, ese mismo año la Nazarena. Al año siguiente La Reina de los Mártires, y al siguiente dejo el Prendimiento y paso a formar parte de la cuadrilla de Gracia y Amparo.
                Actualmente, sigo formando parte de la cuadrilla de la Reina de los Mártires, hasta la pasada cuaresma forme parte de la cuadrilla de costaleros de Nuestro Padre Jesús del Silencio de la Hermandad de el Cerro. Y este año, formare parte si Dios quiere, de la cuadrilla de costaleros del Cristo de la Hermandad Universitaria. Tengo que decir que yo siempre que he ido a una hermandad como costalero, lo he hecho por que era la mía, o por los buenos amigos que tengo entre sus costaleros y cuerpo de capataces. Además, a estos últimos, se les une la virtud de estar verdaderamente capacitados para la labor que realizan. Lo que quiero decir, que aunque me atrae el costal, no he ido a las hermandades por ir, siempre trato de hacerlo porque realmente lo necesite la hermandad o por la amistad que me une a sus cuadrillas.
4.- Costal o martillo.
                Sin duda alguna, y mientras Dios y su Madre Bendita, y mi físico me lo permitan, costal. No se puede decir nunca que de esta agua no beberé, pero mientras la estación de penitencia como costalero me llene de la forma que lo hace, y  mi salud lo permita, ni me planteo el tema del martillo. Además, pienso que es una responsabilidad demasiado pesada, toda una hermandad pone en tus manos lo más preciado que tiene, sus titulares, el objeto de su devoción. Sin olvidarnos de la integridad física de los costaleros a tu cargo. Si a esto unimos las luchas, a veces fratricidas, que se producen en el entorno de los martillos, por gente cualificada o no, olvidando el fondo que debe mover esto que llamamos Semana Santa, me hacen refirmarme en lo comentado, costal. 
5.- Cual es tu sueño hecho realidad con un costal.
                El poder realizar cada año mi estación de penitencia como lo hago, sintiéndome un privilegiado por poder rezarles a Dios y a su Madre con mi esfuerzo y compromiso. Además, todo lo que estos años me han permitido vivir como costalero, la Salida Extraordinaria de La reina de los Mártires, La Salida Extraordinaria de Las Angustias, los ensayos, las estaciones de penitencia…, pero por encima de todo  el compromiso de veintiocho valientes que mirando a los ojos de su cuerpo de capataces en el primer ensayo de ese año, deciden que si Ella les da fuerzas no necesitan a nadie mas. Y doy fe de que Ella nos dio fuerzas, y esos hombres con su alma fajada, y sus alpargatas pegadas al suelo de la realidad de lo estaban haciendo, cumplieron su compromiso. Ellos saben que esto no es alardear, es algo íntimo, nuestro, fruto de la unión de la que gozábamos, pero pasado ya mucho tiempo desde que ocurrió, no creo que haga daño recordándolo. Sin ninguna duda, para mi fue como un sueño. 
6.- Una marcha por estilo.
Cornetas y tambores: Silencio Blanco, Sentencia de Cristo, Sobre los Pies te lleva Sevilla….
Agrupación Musical: Alma de Dios, Resucito, Caminando van por Tientos….   
Banda de Música: La Madruga, Amargura, Soledad Franciscana….
Silencio: Sinfonía de Oro Fino sobre Varales. Se que parece raro, pero tu sabes bien de lo que hablo, todo un lujo para el que observa y para el que va debajo.
Por cierto, una aclaración, me cuesta mucho solo decir una como ya has podido ver, pero en general todas, cada una en su estilo tiene su momento y su cofradía para poder escucharlas en Semana Santa.
7.- Tú capataz, ¿quién crees que es el mejor o los mejores?
                Por lo que me han enseñado, se puede decir que me he criado con ellos, desde que empecé en esto del costal: Lorenzo de Juan Luque, José Antonio García Reyes, José Luis Ochoa Navarro y Federico Tovar.
                Por lo que cada año hacen Pepe Fernández Fernández, Luis Miguel Carrión Huertas y Javier Romero.
                Y por la proyección que creo que tienen de cara a futuro: Enrique Garrido y Jesús Ortigosa Bru.           
                A pesar de lo dicho, respecto a esto del mejor o mejores, decir que puede que alguno o algunos, reúnan un mayor número de cualidades deseables y objetivas para un capataz, pero esto no hace automáticamente malo, o menos bueno al resto. Para mí, todo el que es capaz de asumir la responsabilidad que el cargo de capataz conlleva, y que antes he expuesto, tiene un gran mérito, y debería ser mejor valorado de lo que lo es actualmente en todos los ámbitos de la Semana Santa. Pero el protagonismo que conlleva el cargo, las camarillas que rodean a unos y otros, la llegada de los foros al mundo de las hermandades y el pseudo profesionalismo que tanto se proclama en los últimos tiempos sobre esto, hace que se pierda la perspectiva y el verdadero sentido de la labor que realizan durante la estación de penitencia.  
8.- Un Misterio.
                En Córdoba La Sentencia, y en Sevilla Santa Marta.
9.- Un Palio.
                En Córdoba La Reina de Los Mártires, y en Sevilla La Concepción del Silencio.
10.- Una cuadrilla.
                Cualquiera que reúna determinadas cualidades, muchas de ellas inapreciables desde fuera, por aquellos que se dicen entendidos en el asunto y hablan de mejores y peores. Todo no se puede resumir a lo estético, al número de costaleros, la duración de una chicota, el repertorio… Todo influye, el fondo de lo que supone ser costalero, tantas veces tachado de forma despectiva con el término devoto, el grado de compromiso entre los miembros de la cuadrilla y el cuerpo de capataces, independientemente del número de unos y otros, la sincronización con la banda y el cuerpo de nazarenos, la capacidad de sufrimiento…
                Por todo ello, creo que citar solo una es injusto, pero por la conjunción de todo lo citado anteriormente: el palio de La Merced, el Misterio de La Santa Faz, las Angustias y la Reina de Los Mártires.
11.- ¿Cambios o de frente sobre los pies?
                Ambas, cada una tiene su momento y una cofradía para utilizarla. Si todas andarán igual se perdería algo muy bonito de la Semana Santa, la personalidad de cada hermandad en la calle. Personalmente, he podido disfrutar de las dos y son como las dos caras de una misma moneda.

12.- En la retina se te quedo grabada una imagen, ¿Cuál y dónde?
                La primera vez que vi un palio andando por Sevilla, parecía que iba a ruedas, los que lo estábamos viendo hasta que no estuvimos a un metro de el no nos lo podíamos creer. Era el Palio de la Estrella a la salida de la Catedral buscando el Arco del Postigo.
13.- ¿Paso de Cristo o palio?
                De palio, un regalo del señor con mi altura poder disfrutar de ellos como costalero.
15.- ¿Eres hermano de?
                De La Sentencia y de La Buena Muerte.
16.- A quien te gustaría parecer.
                A nadie en concreto, ser yo mismo, aprendiendo lo que considero mejor de todos los que me han enseñado, y también de lo que veo en cada sitio al que voy.
17.- ¿Qué falta en el mundo del costal?
                Algo fundamental, que también falta en la Semana Santa de Córdoba en general, fondo, conocimiento de lo que somos, y lo que debe de mover los actos de todos los que estamos involucrados en el de una u otra manera.
                En el costal, además de lo mencionado falta algo que históricamente siempre ha ido unido con el, el anonimato, la humildad, el compañerismo y el compromiso de realizar una labor, que en muchas ocasiones es muy dura. Si a esto unimos lo comentado anteriormente surge, desde mi punto de vista, lo mas bonito que puede mover el corazón de una cuadrilla.
18.- ¿Qué sobra?
                Ya lo he esbozado en mi anterior respuesta, el afán de protagonismo, la ausencia de humildad, las ganas de que todos sepan lo que haces y que de una u otra manera se hable de uno. Y la cantidad de gente que llevando en esto dos días se cree que lo sabe todo. A veces pienso que muchos de los que están en este ámbito, serían inmensamente felices si en su carné de identidad, donde dice profesión, pudieran poner costalero, patero derecho de tal paso, corriente de cuarta de tal otro, capataz de…, contraguía de…, hermano mayor de…, tesorero de…. Además como ya he dicho, creo que nos falta madurez, un poco mas de conocimiento de lo que somos, donde estamos y de cómo se hace lo que hacemos. Con ello no digo que debamos ser inmovilistas, pero si conscientes de que la mayor parte de esto ya esta inventada, solo hay que conocerlo y aplicarlo. Resumiendo no se puede saber todo en un día.
                Y por supuesto, sobra la guerra inútil en la que muchos están involucrados sobre que cuadrilla, capataz o filosofía del costal es mejor. Es algo estéril, lo importante es crecer, ser consciente y coherente con lo que uno piensa y hace. De esta forma todos conseguiríamos mejorar año a año.  
19.- ¿Lo mejor?
                Sin duda alguna, los amigos que he hecho bajo las trabajaderas y con la gente del traje negro. Y por supuestos lo que me llena a nivel espiritual el poder hacer estación de penitencia como costalero.
20.- Qué opinas de las Glorias de Córdoba.
                Como nuestra Semana Santa, evolucionando y mejorando, pero hace falta tiempo, paciencia y no olvidar el sentido que las hace nacer.
21.- Una anécdota cofrade que te haya pasado.
                Muchas, pero ahí una que me deja marcado cada año. Un costalero que todos los años, en el primer ensayo se hace el costal al revés, y se faja directamente sobre la carne. Al año siguiente igual, ya van unos pocos, pero sigue viniendo, por algo será.
22.- ¿En que debería mejorar este blog?
Sin ánimo de ofenderte amigo, la gramática y la ortografía. Hay que ser muy pulcros con este tema, pues podemos decir algo totalmente distinto de lo que pretendemos.

Juanlu, gracias de nuevo por ser tan claro en lo que piensas y dices. Un fuerte abrazo. Pachi.

No hay comentarios:

Publicar un comentario