26/02/2010 JOSE AGUILERA
Ultimamente no sé si la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Córdoba está al servicio de las cofradías, o son las hermandades y cofradías las que están al servicio de la Agrupación.
Creo que la Agrupación es una entidad que está para gestionar las necesidades conjuntas de las hermandades, así como para convocar a los hermanos mayores a juntas generales para tomar las decisiones. Eso es lo que creía, puesto que últimamente parece que estas reuniones son informativas, en las que se nos comunican las decisiones que ya ha tomado la junta de gobierno a la Agrupación. Y digo esto porque me parece lamentable que ni siquiera se lleve a votación un cambio de horario, tal y como ocurrió el año pasado y ha vuelto a ocurrir éste. La hermandad de Animas mostró su malestar por el adelanto de horario exponiendo sus propios motivos que nada tenían que ver ni con la estética ni con la descalificación de los componentes de las otras hermandades, tal y como se malinterpretó.
La junta de gobierno de la Agrupación ni siquiera se molestó en mostrar un indicio de colaboración, mientras que a otras hermandades se les beneficia.
Y es que sobre este tema alegan que los estatutos les autorizan a hacerlo sin tener que someterlo a votación de las hermandades. Pues si se llevan a rajatabla los estatutos, han de llevarse para todo, y entonces debían haber entregado en la última reunión general celebrada la memoria y el estado de cuentas 15 días antes de la reunión, y no cinco minutos antes de la misma. El estado de salud del entonces tesorero, a quien desde aquí le continúo deseando su total recuperación, era motivo más que suficiente para que se diera este hecho; pero una vez más no se nos escuchó y la petición de aplazar la reunión hasta cumplirse el tiempo reglamentario fue ignorada, por no hablar de las desafortunadas palabras del señor presidente hacia los hermanos mayores a los que indicó que el estado de cuentas no se iba a modificar y que, al fin y al cabo, era el Obispado quien aprobaba las cuentas y nuestra opinión poco importaba.
De igual modo se nos ha vuelto a ignorar en la última reunión celebrada en la que solicité una reunión de los tesoreros de las hermandades para una cuestión interna y, a mi juicio, de gran importancia.
Y para colmo, en dicha reunión figuraba como uno de los puntos del orden del día la presentación del cartel oficial de la Semana Santa a los hermanos mayores, el cual no se presentó. Quizá esto pueda carecer de importancia para algunos, pero es que me parece una tomadura de pelo que se excusen, para no presentarlo, en que la imprenta no lo ha terminado a tiempo, cuando el cartel es un lienzo que lleva terminado hace semanas. Por no decir que podían haberlo reproducido en fotografía sobre foam para presentarlo, algo que no supone un alto coste teniendo en cuenta lo que se paga por el diseño de dicho cartel. Pero es que tampoco estaba impreso el programa de actos, que tuvimos que copiar a mano; y lo que no entiendo es cómo estaban terminados a la mañana siguiente para la prensa.
Me parece que ya va siendo hora de que alguien se pronuncie sobre esto y actuar en consecuencia o si no, tendremos que optar por la opción de ignorar a la Agrupación de Cofradías y dejar de asistir a las reuniones, actitud que ya parece que han tomado algunos.
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